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La deuda que deja Schiaretti en la Provincia

¿Cuál es la herencia del gobernador en términos de deuda? El stock actual es de 413 mil millones de pesos. El dato positivo es que representa sólo 4,3 meses de recaudación. El peligro: el 90 por ciento del total está en dólares, lo que deja a la Provincia expuesta a los riesgos de una devaluación

Por Marcos Jure

La herencia. La pesada herencia. La maldita herencia. Cada vez que un nuevo gobierno asume, cada vez que el poder cambia de manos, la discusión suele ser la misma: ¿qué dejó el gobernante que se fue? ¿Será administrable la realidad que fue construyendo, principalmente desde el punto de vista financiero, durante los años de su gestión?

A nivel nacional, Mauricio Macri se quejó amargamente en 2015 del estado en que recibió el país, aunque desde su propia fuerza política le reprocharon no haber hecho más hincapié en la herencia económica de Cristina Kirchner. Cuatro años después, Alberto Fernández también desmenuzó el panorama que le había dejado el líder del Pro: una economía parada, en recesión, más de 50 por ciento de inflación, con las supuestas inversiones que nunca llegaron y con un Banco Central exiguo en reservas.

El inventario de la herencia suele ser un argumento para explicar los tropiezos iniciales, las imposibilidades de origen, y también una justificación de las incapacidades propias.

Córdoba se enfrenta en este 2023 a un escenario que no tuvo desde 1999 a la fecha, es decir en el último cuarto de siglo: el poder cambiará indefectiblemente de dueño. Lo hará en términos generacionales o políticos, pero cambiará. Ya no estarán José Manuel de la Sota o Juan Schiaretti. El nuevo gobernador será Martín Llaryora, si el electorado elige la continuidad de Hacemos por Córdoba, o el candidato que surja de Juntos por el Cambio, ya sea Luis Juez o Rodrigo de Loredo.

¿Con qué panorama se encontrará ese nuevo gobernador cuando abra la caja y vea qué le dejaron? Córdoba es una de las provincias más ricas del país, con un sector agropecuario pujante y una industria diversificada. Sin embargo ¿cómo queda el Estado 24 años después de la primera gestión de lo que originariamente se llamó Unión por Córdoba?

Un parámetro que sirve para calibrar el peso real de la herencia suele ser la deuda. Un pasivo puede ser inmovilizante en términos de gestión.

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Ni Juez ni De Loredo han puesto como eje de su campaña el endeudamiento de Córdoba.

Ni Juez ni De Loredo han puesto como eje de su campaña el endeudamiento de Córdoba.

Obras y dólares

En la provincia, una crítica recurrente de la oposición suele ser que Hacemos por Córdoba ha mostrado una inclinación casi enfermiza a tomar deuda. La respuesta desde el oficialismo se repite a grandes rasgos: el pasivo se usó no para gastos corrientes -la Provincia acumula un extenso período de superávit primario- sino para financiar obras de infraestructura que, de lo contrario, serían imposibles de concretar. Por ejemplo, los gasoductos.

Pero vamos a los números. Según el informe de deuda pública que el Ministerio de Finanzas de la Provincia publica en su página web, la deuda actual de Córdoba, en términos reales, alcanza los 413 mil millones de pesos. Es un monto al que se llega después de una conversión porque, en realidad, gran parte del pasivo cordobés se encuentra en dólares. Y ahí está el eslabón más débil de la cadena: por la estructura de su pasivo, Córdoba podría sufrir particularmente una devaluación brusca si es que la decide el próximo gobierno nacional o el actual no puede evitarla.

El informe detalla que el 89,64 por ciento de la deuda cordobesa se encuentra en moneda norteamericana. Al momento en que se hizo el cálculo -noviembre de 2022- ese porcentaje equivalía a 370 mil millones de pesos. Pero con cada centavo que se devalúa el peso, esa carga se incrementa.

Un dato llamativo es lo insignificante que es la deuda que se tomó originariamente en pesos. Córdoba tiene apenas el 0,42 por ciento de su pasivo colocado en moneda nacional. Son 1.730 millones de pesos. Aunque otros 5.500 millones (el 1,33 por ciento del total) se encuentra atado al CER, es decir la variable relacionada a la evolución de la inflación.

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Stock de deuda de la Provincia de Córdoba.

Stock de deuda de la Provincia de Córdoba.

Kuwaitíes

Además de pesos y dólares, Córdoba tiene parte de su deuda en euros: 25.344 millones de pesos (6,13 por ciento del total). En el informe aparece también un dato que puede resultar curioso. La Provincia está endeudada en dinares kuwaitíes. Son 5.068 millones de pesos, lo que equivale al 1,23 por ciento del pasivo.

Esa excentricidad tiene una explicación. En los últimos años, la gestión de Schiaretti, que padeció al igual que el resto del país el cierre de los mercados internacionales para tomar deuda, recurrió a los fondos de los países de Oriente Medio para financiar obras de infraestructura. Por ejemplo, el acueducto que llevará agua desde el río Paraná a Córdoba y que tendrá un costo total estimado en 441 millones de dólares. La primera etapa, de 50 millones de dólares, será financiada por el Fondo Kuwaití para el Desarrollo Económico Árabe.

Más allá de los montos globales, el Ministerio de Finanzas además publica un informe comparativo del stock de deuda existente. Los valores están actualizados para que sean representativos y no queden desfasados por efecto de la inflación.

Si se hace una comparación con los 413 mil millones de pesos de pasivo que existen actualmente, en 2019, cuando asumió Schiaretti su actual gestión, la Provincia tuvo un desendeudamiento de 168 mil millones de pesos. Pasó del equivalente a 581 mil millones hace 4 años a los 413 mil millones actuales. La merma es de casi el 30 por ciento.

El pico de stock de deuda en la última gestión llegó en 2020, cuando alcanzó los 623 mil millones de pesos.

Sin embargo, si el recorrido se hace hasta 2015, año de la asunción del segundo período consecutivo de Schiaretti, el stock de deuda en ese año era considerablemente menor: 249 mil millones. Es decir, el proceso largo habla de un endeudamiento; sin embargo, si la mirada se posa en los últimos cuatro ejercicios, la situación ha mejorado.

Si se consideran los indicadores en dólares -nueve de cada diez pesos de deuda están en realidad en moneda norteamericana-, ese proceso se repite. Actualmente, Córdoba adeuda 2.472 millones de dólares.

Si la mira se posa en el año 2019, cuando se inició el período de gobierno que termina este año, hubo una baja del stock de deuda de 232 millones de dólares. Hace 4 años el pasivo estaba en 2.704 millones de dólares.

Sin embargo, la situación es peor si el término comparativo no es 2019 sino el 2015. Ese año, el endeudamiento de Córdoba alcanzaba los 1.419 millones de dólares, la cifra más baja desde 2005 a la actualidad.

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Casi toda la deuda tomada por Schiaretti es en dólares.

Casi toda la deuda tomada por Schiaretti es en dólares.

Deuda constante

En realidad, Córdoba tuvo una curva de deuda casi constante en términos de stock: desde 2005 a la actualidad, siempre rondó los 2.500 millones de dólares -a veces más, a veces menos-, con la excepción constatada en el trienio 2014-2016, cuando hubo una caída por debajo de los 1.800 millones de dólares.

Esos son los datos en términos absolutos. Pero para comprender el peso real que una deuda tiene sobre las finanzas de una administración, un parámetro indispensable es comparativo: ¿cuántos meses de recaudación representa el pasivo?

En 2005 se produjo la relación más desfavorable para la Provincia: ese año, la deuda representaba 13,8 meses completos de recaudación.

Desde entonces, y hasta 2015, hubo una baja constante en esa relación: el año en que Schiaretti asumió el primero de sus dos mandatos actuales, la relación cayó a su nivel más bajo: entonces la Provincia necesitaba apenas 2,5 meses de recaudación para cancelar el total de su deuda.

A partir de ese piso, la curva cambió de tendencia. Y en el 2020, año de la pandemia, alcanzó a representar 6,9 meses de recaudación. El año posterior, el peso del pasivo se ubicó en 5,5 meses y en 2022 hubo otra baja en esa relación comparativa: la deuda pasó a significar 4,3 meses de recaudación.

Ese es el indicador que usa el ministro de Finanzas, Osvaldo Giordano, para defender la política de deuda de la actual gestión: señala que el pasivo representa solamente 4 meses de recaudación provincial.

Giordano suele señalar que se trata de una deuda manejable y ecualizada de tal forma que no impacte de manera crucial en el funcionamiento del Estado. Sólo un elemento puede alterar esa característica: la dependencia con respecto a la realidad cambiaria del país, inestable por definición, y el consecuente riesgo de que un salto en la cotización del dólar, decidido o impuesto, pueda dejar a Córdoba en un terreno inestable.

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Relación deuda e ingresos.

Relación deuda e ingresos.

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