En un dramático suceso ocurrido durante el domingo en barrio Pueyrredón, de la capital cordobesa, un sargento de la Policía de la Provincia perdió la vida a causa de un infarto mientras intentaba detener a sospechosos de robo junto a su hermano, también miembro de la fuerza policial. La conmoción se extendió entre los residentes del barrio y en la comunidad policial de Córdoba.
Los hechos se desarrollaron alrededor de las 19 horas en la calle Pringles al 1300, donde los hermanos policías, Héctor Osvaldo y Segundo Oscar Soria, de 34 y 48 años respectivamente, observaron a individuos desconocidos que habían trepado la tapia de un predio vecino y accedido a un edificio en construcción. Sin dudarlo, los hermanos Soria enfrentaron a los presuntos ladrones y lograron reducirlos.
La situación tomó un giro violento cuando familiares de los detenidos se presentaron en el lugar, desencadenando una pelea en la que los Soria resultaron heridos y los detenidos fueron liberados. En medio de la confusión, el sargento Segundo Oscar Soria, quien ya padecía problemas cardíacos y tenía tres stents, comenzó a experimentar un fuerte dolor en el pecho.
A pesar de la rápida intervención de sus camaradas y la llegada de varias patrullas policiales, Soria fue trasladado al Hospital Transito Cáceres de Allende, donde, lamentablemente, falleció. La causa de su muerte se atribuyó a un "shock cardiogénico irreversible debido a una arritmia ventricular maligna con infarto agudo de miocardio".
El presunto ladrón, identificado como Matías Samuel Rodríguez, de 37 años, fue arrestado, mientras que el segundo implicado logró escapar. El caso está siendo investigado por las autoridades judiciales, quienes han ordenado medidas procesales como informes de autopsia y la toma de testimonios.
Este trágico incidente se suma a otro reciente en Córdoba, donde el sargento Leandro Galfré perdió la vida por un infarto durante una práctica de gimnasia en la Escuela de Suboficiales. La comunidad lamenta profundamente la pérdida de dos valiosos miembros de la fuerza policial en circunstancias tan desafortunadas.