Este fin de semana, un hincha de Instituto denunció haber recibido amenazas por parte de un hombre y fue obligado a entregar su colección de camisetas de la Gloria. Finalmente, tras una investigación policial, lograron detener al extorsionador en barrio General Bustos de la ciudad de Córdoba.
Extorsionó a un coleccionista para que le entregue todas sus camisetas de Instituto y terminó detenido
El delincuente había amenazado con robarle el auto y lastimar a su hija si no le daba las casacas, por lo que el hombre entregó 89 piezas de su colección. Luego de que el hecho sea denunciado, la Policía arrestó al extorsionador y recuperó 84 camisetas. El hombre fue imputado por supuesta autoría del delito de extorsión.
El coleccionista recibió el primer mensaje el sábado, donde la persona detenida le advertía que, si no vendía sus camisetas, iba a lastimar a su hija. "Si amás a tu hija vendé toda tu colección de Instituto, cagador. Y si denunciás se te pone en contra todo un pabellón”, lo apretaron, según denunció la víctima a El Doce. El hombre decidió bloquear el número pero el domingo recibió más mensajes a través de redes sociales.
La situación escaló cuando los delincuentes encontraron la dirección del lugar en dónde trabaja. “Desde otro número, me mandaron en vivo una foto de mi auto estacionado al frente de mi oficina”, comentó.
Entrega, rescate y detención
El lunes, justo después del partido de Instituto contra Estudiantes, le dieron un ultimátum. El coleccionista tuvo que llevar sus casi 90 camisetas a un baldío ubicado en la esquina de calle José Eusebio Agüero y Avenida del Trabajo, en el límite entre los barrios General Bustos y Talleres.
Después de perder algunos de sus bienes más preciados, la víctima realizó la denuncia ante la Policía. La investigación quedó en manos del fiscal de turno de la Unidad Judicial de Delitos Económicos, Raúl Garzón. Con los testimonios, pudieron reconstruir los hechos y identificar al extorsionador. La Policía de Córdoba lo detuvo tras realizar un allanamiento en su domicilio. El hombre fue imputado por supuesta autoría del delito de extorsión.
Sin embargo, no recuperaron todo el tesoro. En total las autoridades secuestraron 84 camisetas pero hay cuatro que no le pertenecen a la persona extorsionada, por lo que cerca de seis siguen extraviadas.
De momento, todas las piezas quedaron en la unidad judicial porque son prueba en la causa.
A partir de ciertos detalles en las amenazas, hay motivos para creer que las intimaciones llegaron desde la cárcel. Los extorsionistas hablaban en plural, se referían a un “pabellón” y aseguraban ser “de la mafia” y “choros profesionales”.
Un viejo conocido
La víctima aseguró a El Doce que el jefe de los delincuentes resultó ser un conocido. “Es otro coleccionista de Instituto, en su momento tenía una linda colección pero con el tiempo se fue desprendiendo de la misma”, contó. “Le he cambiado, comprado y vendido camisetas. Por eso no salgo de mi asombro”, concluyó.