Sociedad |

Lucía Trejo: La negra cordobesa de 180 años

Es momento de hablar de ella, de Lucía Trejo, la mujer récord en la historia mundial. Lucía Trejo no es sólo la mujer récord de la historia mundial, lo cual es mucho. Lucía Trejo, además de mujer récord, fue cordobesa, fue negra y fue esclava. Y así, con todo, cordobesa, negra y esclava, vivió entre 175 y 180 años: la mujer más longeva de la historia de la humanidad.

Por Juan Cruz Taborda Varela

¿Mito? ¿Leyenda? Pura verdad.

Pura verdad porque lo dice un documento oficial del Estado argentino. El documento oficial del Estado argentino es el informe del Tercer Censo Nacional realizado en nuestro país en el año 1914. ¿Y qué dice el documento oficial del censo sobre nuestra negra esclava llamada Lucía Trejo? Que era un caso único de longevidad en el mundo.

El documento elaborado durante la presidencia de Victorino de la Plaza dice textualmente: “Nuestra historia registra la leyenda de un caso de longevidad extraordinaria, la que no ha sido vulgarizada”.

El sabio y naturalista francés Martín de Moussy dedica una página entera de su celebrada "Description Pbysique de la Confederation Argentine" al caso de Lucía Trejo. Puntualmente, la página 268 del tomo 2.Allí se relata que un viejo manuscrito, con origen en Córdoba, dice: "En una carta relativa al capitán Trejo, padre del señor Obispo de Córdoba -nota mía: se refiere acá a Fray Fernando Trejo y Sanabria, el fundador de nuestra Universidad-, se asegura que una negra esclava, llamada Lucía Trejo, ha vivido hasta el año pasado de 1780, y llegando a tener ciento setenta y cinco años”.

Tanto ayer como hoy, la posibilidad de sumar esa cantidad de años es improbable. El mismo documento del censo se lo cuestiona y busca argumentos para saber cuán cierta o no es la posibilidad de los 175 años. Cuenta el documento oficial del censo, citando el viejo manuscrito, que otras actas levantadas en el Cabildo Eclesiástico de Santiago del Estero y de Córdoba comprueban que, efectivamente, Lucía Trejo, nacida en Córdoba, fue esclava en sus primeros años de vida del Ilustrísimo señor Obispo Don Fray Fernando Trejo y Sanabria, el cual falleció en el año 1614. La negra recuerda que en esa época, ella tendría de 10 a 12 años de edad. Como la partida de defunción de Lucía, trasuntada de los libros parroquiales de Córdoba, arroja que ésta falleció en el año 1780, no cabe duda de que se trata de un caso de longevidad extraordinario, por cuanto alcanzó a ver 175 o quizás 180 años.

Vamos de nuevo: fue esclava del Obispo Trejo, que murió en 1614. Lucía, para entonces, tenía unos 10 años. Había nacido, por lo tanto, en 1604 aproximadamente. Y murió en 1780: ergo, Lucía tuvo unos 179 años al momento de morir.

Los documentos

En un libro llamado La Argentina, de autoría de Ruiz Díaz de Guzmán, se ratifica, una vez más, la información sobre la negra Lucía. Citando viejas actas, relata que el alcalde de Córdoba, Prudencio Gigena Santisteban, ratificó los años de la negra Lucía en función de las informaciones jurídicas que pasaron por él, por el alcalde de Córdoba, remitidas por el Cabildo y la Justicia de Córdoba. Informaciones que a su vez se enviaron a Madrid y que publicó la Corte española en su periódico La Gaceta. La Negra Lucía, a fines del 1700, se hizo internacional.

Por otros documentos citados en el mismo censo oficial se comprueba que un año antes de morir, es decir, en 1779, nuestra negra Lucía fue sometida a un interrogatorio por orden del Cabildo de Córdoba, a cuyo efecto se la transportó desde la ranchería de su habitación sostenida en los brazos de dos robustos negros, hasta un aposento bastante cómodo, donde se la dejó todo un día, para no confundirla, ni molestarla con repetidas preguntas.

Bajo juramento, la negra Lucía dijo que había sido casada una sola vez, que tuvo cinco hijos, de los cuales tres murieron solteros y los otros dos fueron casados, no recordando los nietos, biznietos y tataranietos que pudo tener. Manifestó que había padecido de varia enfermedades violentas y que en su juventud la sangraban casi todos los años. Siendo cocinera en Candelaria se quebró la mano derecha, lo que le impedía en la época del interrogatorio ejercer el ministerio de partera, haciéndolo de sentada y con la mano izquierda.

Recuerda, Lucía, que la población de Alta Gracia estaba en aquella época, dos leguas más hacia la sierra, que la primera iglesia fue de tapial, más tarde alzaron una de piedra y, por fin, edificaron en el sitio de la primera, la que hoy existe.

El alguacil mayor con quien asistió a esa diligencia, manifestó que el aspecto de Lucía Trejo era el de una mujer de 70 a 80 años, viéndola a una distancia de 10 o 12 pasos, pero examinada de más cerca, se notaban los signos de una edad muy avanzada. Su rostro estaba surcado por menudas arrugas y sólo se tocaba en él los huesos y la piel.

Aunque no puede pararse, debido a la debilidad de las piernas, demuestra ser de más que de mediana estatura. Sus brazos son robustos pero secos, lo mismo los dedos de las manos que presentan en las articulaciones gruesos nudillos. El cabello es blanco en la parte superior del cráneo y termina en amarillo a los lados de la cara. En su boca grande, solo faltan las cuatro muelas que salen últimas, y un diente, los demás están todos; pero tan gastados que forman una línea negra junto a las encías.

Conserva el sentido del oído, pero es necesario acercarse para que oiga, aunque sin alzar mucho la voz. En cuanto a la memoria, no está muy fija, pero si se la interroga con calma y descansos, recuerda bien y contesta con precisión en voz muy baja. Sus ojos claros ven regularmente bien, hasta una distancia de 15 o 20 pasos, confundiendo después las imágenes. Tiene el pulso tan firme que lleva sola los alimentos líquidos a la boca sin derramar una sola gota. A pesar de su avanzada edad, se ocupa en hilar y en tizar lana y algodón. Aunque el continuo alimento de los esclavos era el maíz v la carne de vaca, que se les daba de ración, Lucía Trejo fue alimentada con más variedad por haber sido cocinera en ocasiones. Todos estos datos fueron tomados de la revista ''Nuestra Historia", en la cual se hallan transcriptos los documentos a que he hecho referencia. Todo lo dice el documento oficial del censo nacional confeccionado por el Estado argentino en 1914.

Lucía Trejo, la mujer récord, el ser vivo más longevo de la historia humana.

Lucía Trejo, la negra cordobesa de 180 años.

Dejá tu comentario