El presidente Alberto Fernández advirtió este lunes que la presunta eliminación de datos del teléfono celular de una excolaboradora del diputado de Juntos por el Cambio (JxC) Gerardo Milman es de una "gravedad significativa", en un hecho que se investiga como una de las pistas del intento de asesinato de la vicepresidenta Cristina Fernández.
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El Presidente se refirió a las nuevas revelaciones en la causa, tras conocerse que la secretaria de un diputado opositor habría borrado mensajes relacionados con el intento de asesinato contra Cristina Fernández en una oficina atribuida a Patricia Bullrich.
Las declaraciones del Presidente tuvieron lugar durante su visita a la provincia de La Rioja, para felicitar a Ricardo Quintela, electo gobernador en los comicios de este domingo.
"Leo que en el despacho de una diputada se borraban celulares, y eso en términos institucionales es de una gravedad significativa", señaló el mandatario en referencia a las declaraciones judiciales que vinculan esa maniobra con la referente del PRO Patricia Bullrich.
"La que tiene que explicar eso se llama Patricia Bullrich y Milman, que son los que indujeron a que esa empleada dijera eso", sostuvo el Jefe de Estado desde la Rioja. "Con esa verdad podemos saber cómo se mueven algunos de los que tenemos que enfrentar", añadió.
El Presidente se refirió de esta manera a las nuevas revelaciones en la causa, según las cuales una de las secretarias de Gerardo Milman declaró ante la Justicia que el borrado de información contenida en su teléfono celular se produjo en unas oficinas que atribuyó a la referente del PRO Patricia Bullrich, y que el hecho habría ocurrido con intervención del propio legislador cuyo apellido da nombre a una de las pistas que se investigan en la causa del intento de homicidio de la Vicepresidenta.
Se trata de Ivana Bohdziewicz, una de las excolaboradoras de Milman en el Congreso, aparentemente despedida a principios de este año, y quien lo acompañaba el 30 de agosto pasado en el bar Casablanca cuando un testigo de la causa le escuchó decir -según declaró luego en el expediente- "cuando la maten voy a estar camino a la costa".
Bohdziewicz había adelantado días atrás ante la Justicia la intención de ampliar su declaración testimonial y le habían fijado fecha para el 10 de mayo, pero el viernes se presentó de manera espontánea en los tribunales federales de Comodoro Py acompañada de un abogado "manifestando su intención de prestar declaración testimonial en el día de hoy, en virtud de haber recibido presiones".
Exsecretaria de Milman afirmó que borraron su celular en una oficina de Bullrich
Ivana Bohdziewicz, la exsecretaria del diputado de Juntos por el Cambio (JxC) Gerardo Milman, aseguró ante la Justicia que accedió a que un técnico especializado borrara el contenido de su teléfono celular por temor a que se filtrara información de su vida personal y reveló que ese borrado -del que después pudo recuperar toda la información, según dijo- se produjo en oficinas que atribuyó a la expresidenta del partido PRO Patricia Bullrich, según consta en la declaración a la que accedió Télam.
"Le di mi teléfono (a un perito) y estuvo analizándolo y decide borrar todo. Yo preocupada por mi vida personal, en ese momento los medios estaban bastante activos, entonces deciden borrar todo y yo accedí. Tampoco creí que iba a ser tan grave y me iba a perjudicar hacerlo", aseguró Bohdziewicz en la ampliación de su declaración como testigo en el marco de la causa en la que se investiga el intento de atentado contra la vicepresidenta Cristina Fernández de Kirchner.
El valor que puede tener su testimonio está dado en que Bohdziewicz es una de las dos personas que el 30 de agosto pasado estuvieron en el bar Casablanca, ubicado frente al Congreso, en la esquina de Riobamba y Rivadavia, donde según la declaración de un testigo el diputado Milman habría pronunciado la frase "cuando la maten voy a estar camino a la Costa", en presunta referencia al intento de asesinato de la Vicepresidenta que ocurriría dos días más tarde, en la noche del 1° de septiembre.
La exsecretaria de Milman -que dijo haber sido despedida en enero de este año- ya declaró tres veces en este expediente: la primera fue a finales de octubre; la segunda, el 1° de diciembre, y la tercera fue el último viernes; ahora se sabe que entre la primera y la segunda mantuvo un encuentro con el diputado de JxC en oficinas que atribuyó a Bullrich, para que borraran información de su teléfono.
"Va pasando el tiempo y más o menos el 10 de noviembre del año pasado, me llama Carolina (Gómez Mónaco, la otra asesora de Milman que estuvo en el bar Casablanca). A todo esto, Carolina tiene dos líneas, una que no está a su nombre. Me llama desde ese celular y me dice de reunirnos pasado el mediodía, que íbamos a un local de Tienda de Café sobre la avenida Scalabrini Ortiz, a dos cuadras pasando Santa Fe. Nos juntamos y me empieza a preocupar diciéndome que los medios, todo lo que era la parte mediática, estaban avanzando, me transmite preocupación", sostuvo Bohdziewicz.
"Me comenta que había hablado con Jerry (por Gerardo Milman), que para ese momento estaba desaparecido, y Carolina decía que se ponga las pilas que nos dé un respaldo que con el Mundial no se calmaba nada, y me comenta que Milman le dijo que había hablado con Patricia (Bullrich) y que nos iba a poner un perito para ver la información que tenían los celulares, porque era probable que se filtrara nuestra información. No para borrar algo puntualmente", continuó.
De su relato se desprende que, tras esa conversación, ambas emprendieron un viaje en subte hasta un lugar donde las estaban esperando: "De ahí nos fuimos a Avenida de Mayo 953, oficina de Patricia Bullrich, si no me equivoco. Llegamos ahí, no había nadie, solo estaba Milman con el perito, cuyo nombre no recuerdo, pero era morocho, grandote, de unos 60 años aproximadamente, vestido de civil, no recuerdo si estaba con bastón. No había nadie más. Estando ahí, en ese momento, nos enteramos por Milman, no sé si abogados o qué, que habían pedido el secuestro de nuestros celulares. Nunca dijo quién le informó".
"Y en ese mismo momento le di mi teléfono y estuvo analizándolo y decide borrar todo. Yo preocupada por mi vida personal, en ese momento los medios estaban bastante activos, entonces deciden borrar todo y yo accedí. Tampoco creí que iba a ser tan grave y me iba a perjudicar hacerlo", señaló en ese punto la testigo.
"Estuvimos unas 3 ó 4 horas en Avenida de Mayo. Durante esas horas el perito manipuló mi teléfono, solo el mío. Con respecto al de Carolina la idea era que ella comprara otro teléfono. En mi caso, borró la información de mi teléfono porque yo estaba aterrorizada por mi información personal. En esta reunión yo pedí esto al perito para que no se divulgue mi información personal. Me remarcó que era posible que se filtraran cosas y por eso yo tuve el temor", sostuvo.
"Con el celular que tenía Carolina no sé qué hizo. Creo que se lo donaba a la hermana. Pero en esa reunión el perito manipuló mi teléfono para borrar mi información personal. Mi preocupación era que no se filtren mis fotos. Ahí el perito me dice que se pueden filtrar cosas. No es que él quería borrar algo, fue por mi temor a que se filtren mis fotos. Yo le dije que se hiciera lo que se tuviera que hacer para que no se filtrara mi información personal", continuó.
En ese punto, desde la fiscalía se le preguntó si el perito manipuló algún otro teléfono, respondió y la testigo respondió: "Sí, el de Milman, pero no se qué hicieron".
Sobre los teléfonos de Gómez Mónaco, Bohdziewicz sostuvo que en aquella reunión "deciden que Carolina se vaya a comprar un celular nuevo".
"Con la línea que presentó (ante la justicia). Decía que iba a decir que no conocía la contraseña de iCloud, entonces se hacía una nueva y ese fue el celular que entregó", siguió.
Bohdziewicz tenía fecha para ampliar su declaración testimonial esta semana pero el viernes pasado apareció de modo espontáneo en los tribunales federales de Comodoro Py, en el barrio porteño de Retiro, acompañada por el abogado Rafael Benedicto Díaz Flaqué, para pedir que se concretara la declaración en ese momento porque había sufrido "presiones".
Sobre ese punto, atribuyó las presiones a su compañera Gómez Mónaco, quien -según dijo y aportó prueba- la llamó de modo insistente desde que se enteró que tenía previsto ampliar su declaración testimonial.
Con información de La Nueva Mañana y Cadena 3